PIGNA, FELIPE
Venía de ser vencido. Manuel Belgrano, el general que se había ganado la admiración de todos, atravesaba uno de sus peores momentos. Las ruidosas derrotas en las batallas de Vilcapugio y Ayohuma lo habían dejado en una mala posición, no solo política. Abandonado a su suerte y lejos de la gloria, estaba a merced de lo que sobre su persona decidieran los poderosos de siempre, aquellos que poco y nada sabían de las tragedias del campo de batalla.